Para combatir el precio especulativo del cereal, que es la base de la alimentación porcina, cuatro cooperativas del Valle Inferior de Río Negro unieron esfuerzos con apoyo del gobierno provincial y el INTA. El resultado es que han logrado bajar el costo de la producción y recuperaron el interés en ampliar su actividad. Ahora buscan replicar la experiencia con otros pequeños productores de la zona.
Un programa conjunto del INTA con la Subsecretaría de Ganadería de Río Negro y el Instituto del Valle Inferior (IDEVI), posibilitó que cuatro cooperativas de pequeños productores de la zona de Viedma pudieran unir esfuerzos para cosechar una parte del maíz con el que alimentan su producción porcina.
Según informa el portal ADNRioNegro, se trata de una iniciativa que involucra a 25 productores con parcelas que en promedio tienen 6 hectáreas. En esa región, muchos productores han abandonado la actividad porcina por los altos costos de la cría, especialmente de la alimentación, que representa el 70%.
Con la asistencia técnica del INTA de San Javier y el financiamiento oficial que cubrió el 50 por ciento de la inversión, los productores cosecharon 150 hectáreas de su propio maíz, que sirvió para bajar notablemente el costo evitando la especulación de los grandes productores del mercado cerealero.
Participaron en este programa la Cooperativa Agraria San Javier, la cooperativa de producción COOPOP, Corpus Patagonia y un grupo de productores familiares que se asociaron para participar. Mauro Larrañaga, de la Cooperativa Porcus, consideró que este tipo de iniciativas es fundamental para evitar que la producción en pequeña escala desaparezca y que los pobladores de la región tengan incentivos para quedarse a trabajar la tierra.